Chipre tiene un clima subtropical semiárido, con inviernos muy suaves y veranos calurosos y secos que duran alrededor de ocho meses. En los últimos años, la precipitación media anual se redujo continuamente, lo que influyó negativamente en el suministro de agua doméstica del país. En 2016, la escasez de agua afectó al 21,3 % de la población del país; para 2030, se espera que esta cifra aumente hasta el 61,5 %.
En 2008-2009, la escasez fue tan grave en la capital y ciudad más grande de Chipre, Nicosia, que provocó un suministro de agua intermitente. La reducción de las fugas y las roturas de tuberías con un presupuesto limitado se convirtió rápidamente en la máxima prioridad de Nicosia. La empresa de aguas de la ciudad buscó una solución que redujera de forma inteligente la presión en toda el área de medición del distrito (DMA), manteniendo al mismo tiempo una presión mínima en el punto crítico, el punto más alto dentro de la DMA.
A4, socio local de Aquestia desde hace mucho tiempo, presentó una propuesta para la licitación convocada por la Junta de Aguas de Nicosia, con una oferta integral de productos de las soluciones inteligentes de Aquestia. Tras una evaluación exhaustiva, la oferta fue aceptada por la superioridad de los productos, combinada con los años de experiencia de Aquestia, sus profundos conocimientos hidráulicos y su reputación de proporcionar un soporte técnico superior. La propuesta de A4 incluía una válvula de control hidráulico DOROT S300 de 4 pulgadas con un trimado de control EC, controlado localmente por el ConDor, que se configuró para reducir la presión a un punto de ajuste fijo aguas abajo.
La propuesta A4 incluía una válvula de control hidráulico DOROT S300 de 4" con un trim de control EC, controlado localmente por el ConDor
La nueva válvula hidráulica y el controlador ConDor lograron resultados sin precedentes, con lo que la Junta de Aguas pudo regular la presión a varios centímetros del punto de ajuste, independientemente del flujo errático. Ahora se puede mantener de forma dinámica y precisa la presión aguas abajo en relación con el flujo, lo que se traduce en una reducción de la presión media del sector y de la frecuencia de roturas.
El proyecto se desarrolló en tres fases:
Fase 1: se estableció una presión constante en la salida de la válvula.
Fase 2: se estableció la presión en función de los niveles de caudal diurnos y nocturnos, lo que permitió reducir en 6400 m3 el volumen de agua no facturada anual.
Fase 3: se reguló la presión en función de la demanda, lo que redujo el agua no facturada en otros 2400 m3 al año.
En total, la reducción anual del agua no facturada en Nicosia desde la implementación del ConDor fue de 8800 m3, lo que equivale a un ahorro de 10 560 € al año. En términos de beneficios operativos, toda la reconfiguración de la función hidráulica y los cambios de los puntos de ajuste se pueden llevar a cabo de forma remota, y los datos hidráulicos continuos proporcionados sobre el caudal y la presión ofrecen una visibilidad en tiempo real del funcionamiento del sector.
